Piel de arcano, 48 pp.
Nacho Infantas Moscoso
reseñas, comentarios —y otras lisuras— a vuelo de pájaro
(14/05/2008) Hace unos momentos (9.30 pm) me acabo de enterar a través de su sobrino Axel que ha muerto uno de nuestros grandes novelistas de los últimos tiempos, el escritor Edmundo de los Ríos, quien fuera el verdadero iniciador de la novela que abarca el tema de la violencia política en nuestro país con su gran novela Los juegos verdaderos publicada en 1968 por Casa de las Américas de Cuba, luego ese mismo año en México en la Editorial Diógenes; y posteriormente reeditada en Arequipa en 1986 por la Universidad Nacional de San Agustín. Una novela que finalmente pasó desapercibida para la crítica nacional (cosa que no es para sorprenderse) pero que sin duda, ha marcado de muchas maneras a quienes hemos tenido el privilegio de leerla. El gran Juan Rulfo dijo que era "La novela que inicia la literatura de la revolución en Latinoamérica". Efectivamente. Nacido en Arequipa en 1944, Edmundo vivía hace buen tiempo en Lima después de haber estado varios años (desde fines de los 60) en México; luego de un voluntario autoexilio en su vivienda murió este domingo pasado, día de la madre, y hoy fueron enterrados sus restos en el cementerio Jardines de la Paz, en Arequipa. Deja 2 novelas inéditas: Los locos caballos colorados y El mutilado ecuestre, algunos cuentos y muchos artículos desperdigados en diferentes diarios del país y sobre todo en la revista Caretas donde fue por muchos años colaborador.
(25/03/2008) Hace pocos días estuve revisando los libros publicados en Arequipa, en el 2007. He aquí un pequeño recuento: De lo mejor que apareció durante el año y en orden de llegada tenemos Apología del absoluto cotidiano (Editorial Dragostea), tercer libro de poemas de Luis Ormachea, quien por cierto acaba de ser finalista en el concurso COPE-2007; continúa enigmáticamente (por lo del COPE) Nada (Editorial UNSA) de Luzgardo Medina Egoavil (tercer lugar en este concurso); y continúa URGENTE: Necesito un retazo de felicidad (Bizarro Ediciones) de Orlando Mazeyra; luego siguen los debuts de María Miranda: Romané (Editorial Dragostea), hermoso libro que mezcla un poco de poesía con reflexión, y Enfermedad africana (GRITA Ediciones), de Jimmy Britto, segundo libro de narrativa (en este caso y junto con el de Mazeyra, cuentos), algo alentador, dado que existen muchos narradores jóvenes en esta ciudad; y casi finalizando el año aparece Edificaciones trashumantes (Cascahuesos Editores) segundo libro de poemas de Oscar Saldívar Bolívar. Todos de buena factura, los mismos que aparecerán comentados en este blog más adelante.